Se acabó , se terminó. Las tardes de miradas. Las tardes de mariposas en el estomago.
Todo empieza, y todo acaba.
Es mejor así. Aunque en sus sueños siempre seguirás. Y en su pensamiento siempre estarás.
Como un fugaz y pasajero amor.
Una magia recorría sus miradas.
Ella sabia que también sentía , que también soñaba. Pero los dos estaban atados a sus vidas. No podían cambiar todo lo que tenían. No podían soñar con algo mejor.
La luna seguirá saliendo todas las noches, y en la noche tranquila ellos dos se rencontraran en sus sueños.
Aunque a ella le gustaría que el supiera de sus sentimientos...
Pero nunca podrá saberlo, porque no se volverán a ver.
Su olor se quedara siempre en su memoria, su mirada se quedó grabada en su corazón.
El amor te pone a prueba todos los días, con la fatiga del sufrimiento.